Todos los domingos por la mañana, Eucaristía con los jóvenes

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Altar. Capilla Ntra Sra. del Rosario.

jueves, 27 de abril de 2017

EL PAPA EN LA AUDIENCIA DE LOS MIÉRCOLES



"Dios está cerca y camina a nuestro lado".
Recuerda que el ancla era un símbolo de los primeros cristianos

El Papa Francisco inició la audiencia de este miércoles retomando el tema de la esperanza cristiana, recordó que entre los símbolos cristianos de la esperanza está el ancla porque Dios está cerca nuestra y debemos estar anclados a él. Porque camina a nuestro lado y no permanece indiferente, sino que está lleno de amor y ternura por cada uno de nosotros.
En el resumen de la catequesis de ayer, indicó que “las palabras del Evangelio de san Mateo nos aseguran que nuestro Dios es un Dios cercano, que camina a nuestro lado. No es un Dios lejano e indiferente, sino lleno de amor y de ternura por cada hombre y mujer”.
“A diferencia de nosotros, hábiles en arruinar vínculos y derribar puentes, Dios permanece fiel, nunca nos deja solos, sino que camina siempre a nuestro lado, aun cuando nos olvidamos de Él. La existencia de todo ser humano es un camino, una peregrinación”, señaló el Papa.
Recordó también que “la Sagrada Escritura está llena de historias de peregrinos y viajeros, como la de Abraham que, siguiendo la voz del Señor, abandonó su tierra para ir al encuentro de Dios”.
“En el camino de la vida –prosiguió el Papa– nadie está solo, y para nosotros los cristianos, esta certeza es aún más fuerte, pues las palabras de Jesús: «Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo», nos aseguran que él nos cuida y nos acompaña siempre”.
Señaló que “entre los símbolos cristianos de la esperanza está el ancla, que evidencia cómo la esperanza cristiana no es un sentimiento indefinido que quisiera mejorar el mundo con la propia fuerza de voluntad de cada uno, sino la seguridad en lo que Dios nos ha prometido y realizado en Jesús”.
Deseó “que en este tiempo pascual la contemplación de Jesús resucitado, que ha vencido a la muerte y vive para siempre, nos ayude a sentirnos acompañados por su amor y por su presencia vivificante, aún en los momentos más difíciles de nuestra vida”.

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